Los puestos del Mercado Central que prosiguen su andadura en la carpa provisional de la calle Salduba permitirán que «unas 250 personas» trabajen a diario para atender a la clientela. Son trabajadores que, en muchos casos, son miembros de la misma familia, que durante años han estado atendiendo tras el mostrador en sus puestos del mercado de Lanuza.

Un acuerdo con la asociación Atades permitirá al Mercado Central ofrecer desde hoy un servicio a domicilio más amplio que el que tenían hasta ahora. En una colaboración en la que también participará La Veloz se logrará el objetivo de «llegar a todos los distritos», aseguran los detallistas, y «no a un ámbito reducido como hasta ahora». Eso sí, habrá que pedirlo físicamente, no por teléfono.

Lo que la clientela se va a encontrar hoy son 72 puestos abiertos, de los 74 que se han construido (habrá dos vacíos), aunque solo 56 negocios distintos, ya que 16 de estos mostradores se los han quedado algunos de ellos para contar con el doble de espacio. Los 16 detallistas que lo solicitaron al consistorio, pagarán 1.500 euros por usarlos durante los doce meses que dure la rehabilitación.

Una de las carencias que hasta ahora tenía el Mercado Central era que, con las concesiones ya extinguidas, la apertura de los puestos casi era a gusto del vendedor. Podría no hacerlo cuando deseara, pese a ser el principal interesado en hacerlo. Eso ahora va a cambiar. Los detallistas están obligados a subir la persiana todos los días, salvo «excepcionalmente los lunes» si lo desean por descansar.

A las 8.30 horas de hoy está previsto que abra sus puertas el mercado provisional. A partir de ahora, lo hará todos los días desde esa hora hasta las 14.30 por las mañanas de lunes a viernes, y hasta las 15.00 horas los sábados. Y por la tarde de 17.00 a 20.00 horas, como hasta ahora estaba haciéndolo. Esto significa que cada día estará abierto nueve horas al público.