Unas 10.000 personas en Aragón sufren esquizofrenia, una enfermedad mental de «extraordinaria complejidad» en la que además del componente genético y hereditario influyen los factores medioambientales en los que se desenvuelve la persona predispuesta a padecerla. Así se puso de manifiesto ayer en Zaragoza durante la reunión de 20 entidades de salud mental para actualizar conocimientos en torno a la esquizofrenia.