La madrugada de ayer comenzó con un apagón para unos 10.000 hogares de Zaragoza. Fueron los afectados de una avería producida en cuatro líneas de media tensión que dependen de la subestación eléctrica de Miraflores, en la confluencia de Camino de las Torres con Cesáreo Alierta, y que coincidió con la tormenta con aparato eléctrico que descargó sobre la capital y en el resto de la comunidad autónoma. Según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), «cerca de mil rayos», un 10% de los 10.000 que se registraron en toda España.

Por la sucesión de rayos y el hecho de que estos se produjeran a la misma hora que el apagón eléctrico, pasada la medianoche del lunes al martes, hace pensar a la compañía Endesa, que este fuera el motivo de la incidencia, Esta afectó a clientes ubicados en zonas como la avenida de San José, San Juan de la Cruz o el propio entorno de la subestación, ya que aglutina «más del 2% de los 400.000 que hay en la ciudad» y un 25% de los 40.000 clientes a los que esta da suministro a diario. Un apagón que duró más de tres horas para muchos de ellos. Otros recuperaron la luz pasados los primeros 60 minutos.

«Estamos barajando la posibilidad de que la desconexión simultánea pueda deberse a la tormenta», explicaron desde la compañía. Esta descartaba la otra hipótesis, la subida de tensión por el aumento del consumo que podría estar provocando estos últimos días otro fenómeno meteorológico, la subida de unas temperaturas más propias del verano, que empieza hoy.

por la hora // Endesa explicó que a esas horas «baja la carga sobre la red de forma considerable». A la hora del apagón se estaban consumiendo «1.163 megavatios» de forma simultánea, 300 menos que los «1.484 que hubo a la una de la tarde» o los «1.525 de las 18.00 horas» del lunes.

No obstante, los hogares afectados recuperaron el suministro por vías alternativas, no porque se recuperara la línea averiada. Mientras, la compañía sigue trabajando en las causas, porque la de Miraflores es una de las subestaciones que más clientes tiene conectados y, sobre todo, porque la ola de calor actual no parece que vaya a remitir. Y con ella, las necesidades de consumo de luz.

De hecho, el verano se estrena devolviendo el termómetro a los 40 grados. Será mañana en Zaragoza cuando se alcancen, igual que hace una semana. Y seguirá en los días siguientes.