El tramo de la vía A-226 que une Cantavieja y Mirambel, en el Maestrazgo turolense, abrió ayer por fin al tráfico, tras finalizar las obras de acondicionamiento el pasado mes de octubre. La intervención, que ha supuesto una inversión de 3,6 millones de euros y que ha sido llevada a cabo por la UTE (Unión Temporal de Empresas) Construcciones Ayud y Ande Ejea S. L., ha permitido mejorar un tramo de 8,4 kilómetros de carretera. Concretamente, se han visto beneficiados los accesos desde Mirambel y La Cuba a Cantavieja, así como las comunicaciones con la Comunidad Valenciana desde la provincia de Teruel.

El trazado presenta tras la mejora un ancho de ocho metros, excepto en el descenso desde Cantavieja hasta el río del mismo nombre, donde tiene siete metros. También se han construido un nuevo puente de 60 metros de longitud sobre el río y dos áreas de descanso, y se han colocado 5.500 metros de barrera lateral con el fin de mejorar la seguridad vial en todo el trazado.

Además, se ha aprovechado para mejorar los accesos a la calle Ericas desde la carretera, los pasos ganaderos y la entrada a caminos y fincas particulares.