Los bomberos de Zaragoza acudieron ayer por la tarde a las inmediaciones del Parque de Atracciones de Zaragoza, donde se celebraba la fiesta estudiantil de San Pepe, alertados por sanitarios del Salud por la caída de un joven por un terraplén, que se había dado un golpe en la cabeza.

Según explicaron fuentes del cuerpo, cuando llegaron, poco después de las 19.00 horas, comprobaron in situ cómo otro joven caía por el mismo lugar. Según explicaron las mismas fuentes, los afectados eran jóvenes que estaban participando en la fiesta practicando el botellón en el exterior del parque.

El cortado por el que cayeron varios de ellos -aunque al parecer solo uno tuvo que ser trasladado en ambulancia- estaba en el lado de la subida hacia el parque desde Casablanca.

Ante la evidente peligrosidad de la zona, los bomberos requirieron el auxilio de los agentes de la Policía Local, en primer lugar para que vigilasen la zona, y en segundo para que trajesen vallas para perimetrar la zona. También convocaron a voluntarios de la agrupación de Protección Civil para que ayudasen a prevenir que más asistentes sufrieran caídas accidentales. Algo bastante probable, dadas las condiciones en las que iban y que el terraplén parecía un sitio propicio para apartarse a orinar o para que las parejas buscaran intimidad.

Fueron los incidentes más reseñables en una fiesta que volvió a convocar a centenares de estudiantes y jóvenes para la conmemoración adelantada de San José, patrón de los ingenieros. De hecho, esta fiesta en otras ocasiones solía celebrarse en terrenos más próximos al Centro Politécnico Superior del Actur, más en su variante de botellón. Una zona que de hecho, en este sentido de los barrancos y los terraplenes, era más segura, simplemente por ser mucho más llana que el accidentado paraje de los Pinares de Venecia donde se ubica el Parque de Atracciones.

El joven accidentado fue trasladado al hospital por una ambulancia del 061. No se pudieron obtener datos de su estado, aunque aparentemente no revestía gravedad, según fuentes consultadas. El resto de las caídas que se llegaron a producir fueron aún de menos entidad y se quedaron en meros revolcones por el terraplén vallado.