La Asociación de Entidades Locales del Pirineo Aragonés (ADELPA) ha remitido al Gobierno de Aragón el acuerdo de su Asamblea General que pide la paralización del Plan de Depuración del Pirineo incluido en el vigente Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración.

Entre los motivos que aduce la organización figuran el sobredimensionamiento de las instalaciones y su falta de sostenibilidad económica y ambiental o el desacuerdo con las soluciones técnicas adoptadas, que no contemplan opciones como filtros verdes que "pueden ser mucho más sostenibles para las dimensiones de los núcleos de población", señala la asociación en una nota de prensa.

La entidad critica asimismo que las obras, declaradas de interés general por el Plan Hidrológico Nacional y el Plan de la Cuenca del Ebro, están sin ejecutar después de 7 años, a pesar de que los contratos para la construcción y explotación de estas depuradoras se adjudicaron en 2009 con un plazo de ejecución de 2 años.

Los ayuntamientos del Pirineo también están en contra del sistema de contratación, que supone la concesión de la explotación de las depuradoras durante 20 años a las empresas adjudicatarias y cuyos cálculos parecen "claramente inviables económicamente".

Por este motivo, la asamblea de Adelpa acordó instar al Ejecutivo autonómico a que en la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas que acompaña la Ley de Presupuestos de Aragón para 2016, se incluya la paralización de todos los proyectos de depuradoras del Pirineo incluidos en el dicho plan y que no estén iniciados.

Además de que se revisen los contratos adjudicados en todas las obras de depuración no ejecutadas, para su rescisión en la parte que no se ha llevado a cabo, hasta la aprobación de un nuevo plan acorde a la realidad y a las circunstancias actuales.