La esperada puesta en marcha del sistema antiniebla del aeropuerto de Zaragoza tendrá que esperar dos meses más. El Ministerio de Fomento había anunciado que durante este mes de marzo el sistema entraría en funcionamiento, pero según fuentes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) la instalación no ha superado las últimas pruebas a las que ha sido sometida y tendrá que "rediseñar" algunas cuestiones, "algo que llevará su tiempo" lo que supondrá "que se alarguen los plazos" de su puesta en marcha. La nueva fecha estimada es el mes de mayo.

AENA confirma en todo caso que "las obras ya están acabadas" y que el sistema ILS categoría II/III --el nombre técnico del sistema antiniebla-- está a la espera de que se aprueben las nuevas maniobras de aproximación pertinentes antes de su puesta en explotación. Una ponencia de Navegación Aérea donde intervienen el Estado Mayor, AENA y otros organismos aeroportuarios es la que tiene que dar el visto bueno al sistema de visión reducida definitivo. Las nuevas maniobras podrían publicarse en abril y por lo tanto, si no se producen nuevos retrasos, entrar en vigor un mes después.

El ILS es un sistema de posicionamiento que permite operar a las aeronaves en días con escasa o nula visibilidad --como sucede los días de niebla abundante-- y evita el desvío de los aviones hacia otros aeropuertos mediante señales al ordenador de vuelo. Las obras de balizamiento y pintura del asfalto de las pistas de aterrizaje, última fase en su desarrollo, se acometieron durante el pasado año.

El retraso en la puesta en funcionamiento del sistema antiniebla provocó ayer las críticas de CHA, al considerar que el potencial del aeropuerto "se ha visto lastrado durante años por no disponer de este sistema". La formación considera que esta situación ha provocado que en los últimos años se hayan incumplido los plazos de inversión previstos en los presupuestos generales del Estado.

COSTE MENOR

La empresa gestora de aeropuerto no ha informado sobre si el nuevo retraso en la puesta en marcha de esta tecnología supondrá un desembolso mayor a la inversión prevista para su desarrollo. Las últimas cifras hablaban de un coste de 7,5 millones de euros, una buena rebaja frente a los 12,5 por los que fue licitado.

El sistema antiniebla es una de las reclamaciones históricas de la instalación zaragozana. El pasado mes de enero varios vuelos procedentes de París tuvieron que desviarse a Barcelona por la imposibilidad de tomar tierra por la presencia de niebla en las pistas, algo que se evitará con el control de vuelo. En todo caso, los mayores beneficiados del ILS serán los aviones de carga y descarga, principal volumen de negocio de la instalación aeroportuaria.