La plataforma de afectados por hepatitis C acogió ayer con "cautela" la inminente administración del tratamiento a los pacientes preferentes aunque "lo ideal sería la aplicación desde el mismo diagnóstico", indicó Vicky Royo, portavoz del colectivo. "En Aragón hay 4.600 afectados por la hepatitis C. ¿Qué se supone que debemos hacer, esperar a que el resto llegue a los niveles F2, F3 o F4 para darles la medicación?", cuestionó. En todo caso, la plataforma admitió que la noticia es "muy buena" porque "llega a los más graves", pero "no la mejor" y denunció que "buscan dividirnos a nosotros. "En España hay 12 entierros diarios por esta enfermedad. ¿Qué prefieren: pagar a más profesionales y que haya más consultas o que siga habiendo tantos sepelios?". En ese sentido, Simón consideró que reclamar medicamentos para todos es lícito y posiblemente el paciente "tiene razón" al quererse tratar con cualquier grado lesional, pero esa es una situación "idílica" que no se aplica ni en los países más avanzados porque hay que "priorizar", y el plan estratégico español lo hace de manera "muy justa y muy sensata", en los pacientes que pueden evolucionar a formas más avanzadas de la enfermedad, aunque consideró que "puede ser bueno" tratar a todos.