Ana Sancho, alcaldesa en funciones de Venta del Olivar; Antonio Aragüés, de Alfocea y José Antonio Hernández, de San Gregorio, exigieron ayer al portavoz del grupo municipal del PP, Eloy Suárez, que rectifique sus declaraciones del martes o que presente pruebas y les lleve a los tribunales. El portavoz popular afirmó que a él en el partido le gustan "las cosas bien hechas" y dentro "del cauce de la legalidad", al ser preguntado por cómo valoraba que estos tres alcaldes de barrio, que habían sido elegidos bajo las siglas del PP durante la pasada legislatura, decidieran en esta ocasión concurrir como independientes.

"El primer día Eloy Suárez nos dijo que eso era un barco, que él capitaneaba y que el que no le siguiera ya sabía por dónde saldría". Así definió Ana Sancho el origen, para los tres ediles, de las discrepancias con el partido. "No estamos dispuestos a seguir la disciplina del partido por encima de los intereses de nuestros vecinos", insistieron los tres. Recordaron cómo les dijeron que, de no cumplir con las directrices populares, "lo notarían en los convenios con la DPZ". Pero la legislatura ha sido larga y se han ido sumando encontronazos. Incluso llegaron a trasladar su postura al presidente provincial, Luis María Beamonte. Las declaraciones de Suárez poniendo en duda la legalidad de sus actuaciones terminaron de cargar las tintas.

"Que diga cuáles son esas ilegalidades o que se retracte, porque debe saber que acusar así tiene sus consecuencias", incidió Ana Sancho, que manifestó que seguirá siendo militante del PP porque quiere "que se depuren responsabilidades". Los enfrentamientos del partido han llevado en el barrio rural a que en los últimos años, los propios vocales del PP tumbasen las subvenciones para las asociaciones culturales. "Nos pedían la factura antes que la subvención: eso es una ilegalidad", expresó Sancho, que cree que el único objetivo de estos "ataques" es conseguir prescindir de ella como alcaldesa.

El alcalde de Alfocea, que repetirá en el cargo porque es el único candidato en estas elecciones, insistió en que él "no miente" y en la "indignidad" de Suárez, que "ni visitó Alfocea, ni me llamó ni se preocupó" cuando se produjeron las inundaciones del Ebro. Y aunque desde el PP afirman que el partido no quiso contar con ellos, Aragüés les recuerda que le llamaron para ser interventor en las elecciones.

José Antonio Hernández, que lleva 24 años al frente de la alcaldía rural de San Gregorio, quiso recordarle a Suárez que "es un servidor de los ciudadanos y el partido no es su cortijo, ni nosotros somos sus súbditos". Para Hernández, Suárez debe rectificar, o si no, no descarta acudir a los tribunales para defender sus derechos. "La única disciplina que sigo es la de los vecinos", insistió.