El consejero de Movilidad y Vertebración del Territorio de la DGA, José Luis Soro, consiguió ayer el buscado "consenso" de los alcaldes de los 9 municipios por los que discurre el tramo sin desdoblar de la N-II para cambiar de estrategia. Como ya había apuntado hace unas semanas al hablar de la N-232, con la carretera de Barcelona se va a abandonar la histórica y nunca cumplida solicitud del desdoblamiento en favor de la apuesta más "realista" del rescate temprano de la autopista, entre Alfajarín y Fraga.

De momento es poco más que una idea, pero Soro valoró el contar con el "apoyo" de los ediles para actuar como portavoz de sus reclamaciones en Madrid. Será una negociación compleja, porque no solo hay que hacer cuentas con la indemnización que se pagaría a la concesionaria Abertis --con la que aún no han hablado--, por adelantar el fin de la concesión actual, hasta el 2021. También habría que acometer obras para crear accesos --al menos cuatro-- desde la "autopista convertida en autovía" a los pueblos a los que no tiene salida.

Por ahora, mientras la DGA pide audiencia en Madrid, tocará hacer cuentas. Una tarea que está costando más de lo previsto, ya que Soro, según aseguró, se ha encontrado con el hecho "curioso" de que el Gobierno de Aragón y el Estatal actúan como "departamentos estanco" con la información, de forma que no tienen datos económicos, que ya han solicitado. Cuando su formación, CHA, los solicitó en el Congreso a través de la Izquierda Plural se los negaron porque no se contemplaba el proyecto.

El Gobierno aragonés, detalló Soro, ha asumido que, con partidas presupuestarias anuales de 1,5 millones de euros para el desdoblamiento de la N-II, como la del año pasado (y a falta de ver los que se aprueban este viernes), el desdoblamiento nunca se va a acometer.

PARTIDAS

Teniendo en cuenta estos ingresos que no se ejecutan, la valoración del desdoblamiento en 365 millones según un informe del año pasado (de Pina a Fraga, ya que desde Alfajarín es medioambientalmente inviable) o los tres millones de bonificaciones de peaje que se ahorraría la DGA con el rescate de la autopista, la alternativa les parece a priori realizable. "Incluso a la concesionaria le puede interesar recibir dinero ahora", aventuró el consejero de Movilidad.

Soro recabó ayer por la tarde en una reunión en el Pignatelli el apoyo de los ediles de Alfajarín, Nuez, Villafranca, Osera, Pina, Bujaraloz, Peñalba, Candasnos y Fraga. Así lo confirmó el alcalde de esta última, el socialista Miguel Luis Lapeña, que mostró su alegría por ser convocados por un consejero "que lleva apenas cuatro semanas en el cargo".

Lapeña confió en que se abra "un tiempo nuevo" en que puedan hablar "con una voz única" en Madrid, con una propuesta "más real" que el desdoblamiento. "Los pueblos de la N-II debemos trabajar no solo por ser importantes centros logísticos sino por la seguridad de las personas", valoró.

Por ello, el plan de la DGA no solo pasaría por el rescate de la AP-2 y la construcción de accesos, sino por el arreglo de la N-II para mejorar su servicio para el "tráfico local". De lo que no hay previsión, confirmó Soro, es de fechas, más allá de un "cuanto antes", en un proyecto que da sus primeros pasos.