El Ayuntamiento de Alcañiz pondrá en marcha hoy una oficina para prestar asistencia a los afectados por el corrimiento de tierras del cerro Pui Pinos, que tuvo lugar el pasado martes, y que será atendida por un asistente social que solventará las dudas de los vecinos y les ayudará para tramitar ayudas.

La oficina, según informó el consistorio, se ubicará en un local municipal situado en el número 2 de la calle Mayor y estará abierta en horario de 9.30 a 13.30 horas.

Fuentes del ayuntamiento indicaron que continúan los trabajos para asegurar el cerro tras los desprendimientos que en la madrugada del martes obligaron al desalojo de 33 personas.

En concreto, se están asegurando las zonas de riesgo del talud y se está realizando el descabezado del talud quitando el peso que tiene ahora para evitar que se deslice.

La previsión es que el próximo viernes, una vez se quiten las cuñas, la zona ya esté segura y algunos vecinos puedan volver a sus casas al tiempo que comiencen los trabajos de desescombro. Aun así, desde el consistorio precisaron que «todo dependerá» de las directrices de los geólogos, que pueden variar según avancen los trabajos.

En este sentido, las citadas fuentes añadieron ayer que los propietarios de las viviendas que no resultaron afectadas y que solo se desalojaron por precaución podrán volver a sus domicilios «una vez se asegure el talud».

Por su parte, en las casas con la estructura dañada será necesario realizar una inspección técnica por parte de los arquitectos municipales y de los seguros para comprobar cómo se puede garantizar su seguridad.

SIGUE EL RIESGO / «Había humedad en la zona donde se produjo el problema, eso podría ser una posible causa. Sin embargo, ahora hay un talud sin ninguna humedad y que está en riesgo de derrumbe. Por lo tanto, técnicamente hay que esperar al informe», dijo ayer el alcalde de Alcañiz, Juan Carlos Gracia Suso.

Por su parte, la Subdelegación del Gobierno en Teruel se reunirá hoy con los afectados por el desprendimiento de Pui Pinos para informarles de las ayudas que existen a su disposición. Además, la Diputación Provincial de Teruel ha anunciado que el próximo 23 abril se reconocerá la labor del bombero que dio la orden de desalojo el pasado martes de madrugada.

El suceso tuvo lugar en la antigua N-232, a su paso por la localidad, y el desprendimiento se llevó por delante tres viviendas de la Ronda de Teruel. Previamente, habían sido desalojadas a un total de 33 personas de 12 viviendas en la zona. Tres horas después, el cerro se derrumbó sobre las casas.