El Ayuntamiento de Jaca alertó ayer públicamente de una posible irregularidad en la venta de viviendas en el núcleo de Badaguás, que solo tendrían licencia como apartahotel. Según informó el consistorio, ante las informaciones que han recibido sobre ofertas de venta a particulares, el departamento de Urbanismo del consistorio jacetano quiso aclarar públicamente que «el uso residencial o de vivienda no está contemplado» para esta promoción, construida por Fadesa en terrenos correspondientes al antiguo pueblo y adquirida posteriormente por un grupo inversor.

La comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Jaca acordó, en su última sesión, informar públicamente de que el núcleo urbano de Badaguás fue rehabilitado con la finalidad de ocuparse y utilizarse como un equipamiento hotelero que, según su inscripción registral, constituye «una única unidad empresarial de explotación bajo la figura de complejo hotelero-apartamentos».

Las licencias concedidas para la construcción de los actuales edificios, aclaró el consistorio, lo son para un aparthotel, existiendo ya, de hecho, licencia de funcionamiento para dicho establecimiento.

Por lo tanto, insistió el departamento de Urbanismo, «el uso de vivienda o residencial no se encuentra contemplado en el actual marco urbanístico» y, en consecuencia, los apartamentos que se pueden estar ofertando «no cuentan ni podrán contar con licencia de primera ocupación».

INFRACCIÓN MUY GRAVE

Además, añadió el consistorio, la conversión de los edificios del apartahotel en viviendas de uso particular supondría una infracción muy grave en materia urbanística, sancionada según la Ley de Urbanismo de Aragón con multas que pueden alcanzar los 300.000 euros, aunque este aviso parece ir dirigido más para los promotores de la venta, si realmente se está llevando a cabo, que a los posibles clientes.

Según explicó el alcalde, Juan Manuel Ramón, el consistorio no ha contactado con el grupo inversor oscense que adquirió el complejo, pero ante las consultas de algún particular por la posible venta de viviendas («no hemos visto oferta escrita»), que en principio no sería legal, ha preferido lanzar un aviso preventivo a los posibles compradores.