El Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de La Alfranca ha recuperado y puesto en libertad en lo va de año a 349 animales, el 42 por ciento de los que han ingresado, mientras que otros 160, el 19 %, permanecen hospitalizados con buenas perspectivas.

Según ha informado hoy el Gobierno de Aragón, este año han ingresado en el centro 1.502 animales, de los 823 llegaron vivos y 679 ingresaron ya muertos para practicarles una necropsia y determinar la causa de la muerte.

En más de mil intervenciones han participado Agentes para la Protección de la Naturaleza y ha aumentado la colaboración ciudadana, con más de 500 llamadas solicitando el rescate de un animal.

La mayoría de los rescates se producen en los meses de verano como consecuencia del abandono de los nidos y las madrigueras de los ejemplares jóvenes nacidos durante el año, con mayor actividad y densidad de la población.

Los animales más rescatados son las aves, que suponen el 75 % del total, las más numerosas las rapaces y las cigüeñas.

El centro se encarga de recuperar a la fauna silvestre y, en principio, no recoge animales exóticos salvo en casos raros o cuando se trata de especies protegidas internacionalmente.

Este año se ha dado uno de estos casos excepcionales, el de un águila imperial ibérica (Aquila adalberti) que tiene en España su único reducto, que no habita en Aragón y que es una especie en peligro de extinción a nivel mundial.

El ave llegó con un grave politraumatismo pero respondió al tratamiento y pudo ser liberada, equipada con un emisor GPS que permite conocer su paradero en cada momento.

Desde su liberación en Tarazona (Zaragoza) a principios de julio ha ido hasta Segovia y ha vuelto, y actualmente se mueve entre la cordillera Ibérica y el valle del Ebro, dentro de la provincia de Zaragoza.

Los Agentes de Protección de la Naturaleza recogen, allí donde se encuentren, a los animales salvajes accidentados y en dificultades para trasladarlos al centro de recuperación.

En ocasiones se encuentran en lugares de difícil acceso, a los que tienen que acceder escalando o suspendidos con cuerdas y el rescate puede prolongarse varias horas.

En Aragón trabajan 350 Agentes para la Protección de la Naturaleza.

La Dirección General de Sostenibilidad recuerda a los ciudadanos que es peligroso manipular fauna salvaje, ya que los animales pueden defenderse y transmitir enfermedades o dañarse a sí mismos, al tiempo que a agradece la colaboración y recuerda que el modo más rápido de prestar ayuda a un animal salvaje en dificultades es llamar al teléfono de emergencias 112 "SOS Aragón".