El alzheimer afecta a entre el 6 y el 8% de la población aragonesa de edades comprendidas entre los 65 y los 85 años, una enfermedad cuyos síntomas de alarma son los cambios de memoria en la vida cotidiana y la dificultad para planificar y resolver problemas o para comprender imágenes visuales.

Los expertos subrayan, con motivo de la celebración del Día Mundial del Alzheimer el próximo domingo 21 de septiembre, la necesidad de un diagnóstico precoz para luchar contra esta enfermedad.

"Si se sospecha que un familiar podría tener la enfermedad de Alzheimer debe llevarlo lo antes posible a su médico", asegura Sonia López, directora de la Residencia Reyes de Aragón de Zaragoza, en un comunicado.

Ya que una evaluación psiquiátrica completa y un examen médico pueden determinar si los síntomas son realmente por esta enfermedad o por otro problema médico, agrega.

Por ello, con motivo del Día Mundial del Alzheimer, desde la Residencia Reyes de Aragón han facilitado un listado de señales ante las que se debe estar atento si un familiar cumple alguno de los siguientes síntomas.

Entre ellos, cambios de memoria que afectan a la vida cotidiana, dificultad para seguir los pasos de una receta, manejar las cuentas mensuales, leer o seguir o participar en una conversación.

También regalar cantidades exageradas de dinero a alguien, que quiera venderles algo o cambios en el humor o en la personalidad.

"Estas personas necesitan minimizar la confusión y mantener el sentido de estabilidad y comodidad en sus vidas", explica López.

En este sentido, subraya la necesidad de que tanto los familiares como las personas a cargo del paciente "obtengan la mayor información posible acerca de la enfermedad".

Aunque el Alzheimer es una enfermedad que no tiene cura, actualmente se están llevando a cabo varias investigaciones desde diferentes centros de Zaragoza, entre ellos el ensayo clínico en humanos de la vacuna en la que trabaja la empresa Araclon Biotech.

El Alzheimer se trata de una enfermedad degenerativa que ocasiona la muerte progresiva de las neuronas provocando la pérdida de capacidad de las funciones controladas por el cerebro.