Alrededor de un tercio de los primeros alumnos admitidos al grado de Medicina proceden de Aragón. El dato, corroborado ayer por la Universidad de Zaragoza, vuelve a subrayar la gran demanda existente para la titulación más solicitada del campus público, que oferta 180 plazas en Zaragoza y otras 50 en Huesca.

Sin embargo, la universidad ha admitido en primera instancia a 324 estudiantes "porque muchos van a renunciar". De todos ellos, un número muy reducido --poco más de 100-- proceden de la comunidad autónoma, algo que se viene repitiendo cada año. De hecho, tras el proceso de inscripción del año pasado, apenas 128 de los 394 alumnos que pasaron el primer corte procedentes de la Selectividad o Formación Profesional eran aragoneses.

La razón del desequilibrio radica en que los universitarios que aspiran a cursar Medicina solicitan plaza en varios centros de España en caso de que no pueda acceder a la universidad más cercana o porque quiere disponer de varias opciones. Así, cuando a los alumnos de fuera se les otorga plaza en una universidad de su lugar de procedencia se da de baja en Zaragoza. De ahí que la institución académica aragonesa amplíe los alumnos admitidos en primera opción hasta los 324 y, así, se protege ante la numerosa cantidad previsible de renuncias.

LISTA DE ESPERA Desde la facultad tampoco se presta especial importancia a la notable reducción --algo más de 2.000 alumnos menos-- de la lista de espera respecto al año pasado. "Es altamente engañoso sumar los aspirantes de Zaragoza y los de Huesca porque muchos de ellos piden las dos al no haber un sistema unificado de admisión, pero muchas solicitudes no cuentan con ninguna probabilidad de venir aquí, pero la eligen solo por curarse en salud ya que te dejan elegir todas las facultades de España, pero, repito, eso no se traduce en instancias solventes", indicó el decano, Javier Castillo.

Así, la situación no habría sufrido grandes variaciones respecto a cursos anteriores. "No ha cambiado significativamente el panorama profesional ni existen más dificultades", aseguró Castillo, que recordó que "en los últimos años ha id creciendo el número de admisiones y ha disminuido directamente la cantidad de residentes que entra cada curso".

La nota de corte para acceder a la titulación también bajará. Medicina ha sido, una vez más, la carrera que ha exigido, de entrada, una calificación más elevada. En Zaragoza hace falta al menos un 12,4 para entrar en primera instancia --una valoración muy similar al 12,425 impuesto el año pasado--, mientras que esta nota exigida baja al 12,276 (frente al 12,352 del año pasado) en Huesca.

En el 2013, la nota de corte final quedó establecida en un 12,04 en Zaragoza y 12,01 en la capital oscense.