La autopista pública aragonesa ARA-1 permanecerá cortada desde las 9.00 horas del lunes hasta las 00.00 del miércoles, por obras de cimentación para rematar los trabajos de reconstrucción que la afectaron. La vía fue reabierta al tráfico por completo en ambos sentidos (de Villafranca a Belchite y viceversa) a finales de mayo, pero quedaban pequeños remates que, con este cierre de dos días, prácticamente estarán terminados, indicaron fuentes del departamento de Obras Públicas de la DGA.

La ARA-1, que conecta la N-II con la N-232, resultó dañada por las riadas de marzo del 2015, y las obras de cimentación se prolongaron prácticamente un año, hasta que en febrero de este año pudo reabrirse un carril, al tiempo que comenzaba a actuarse en el paso inferior del puente. Los remates de obra han conllevado cierres puntuales de carriles durante algunas horas, pero parece ser que están por concluir.

El escaso tráfico que registra esta vía motivó que el sistema de pago que aceptó la empresa concesionaria --llamado peaje en la sombra o sistema alemán--, que recibe pagos de la DGA según su uso llevase a la quiebra a la compañía. De hecho, está pendiente de dirimir un conflicto de responsabilidad patrimonial para decidir quién paga la deuda de 45 millones que dejó.