El Gobierno de Aragón ha organizado hoy una reunión con diferentes instituciones y afectados para presentar un protocolo y plan de actuación ante los ataques de lobo al ganado, situación que se prevé que vaya "in crescendo".

"Es una situación ahora local pero tenemos que pensar en global porque va a ir in crescendo. La situación en España es así, el lobo se está desplazando", ha señalado la directora general de Sostenibilidad, Pilar Gómez, en declaraciones a la prensa previas al encuentro hoy en Zaragoza.

En esta comisión institucional han participado, además del Gobierno de Aragón, representantes de la Delegación del Gobierno, el Servicio de Protección de Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), Protección Civil y el alcalde de Leciñena (Zaragoza), en representación de los municipios afectados por los ataques que se han producido al ganado por un ejemplar de lobo en la comunidad.

Tal y como ha informado la directora general de Sostenibilidad, no hay una cifra exacta de ataques ni de ganado depredado y es hacia esa dirección a la que se dirige la elaboración de un protocolo de actuación, para que los ganaderos "sepan qué procedimiento seguir a la hora de comunicar a la administración un incidente de este tipo".

En la reunión se han presentado dos protocolos de actuación: uno de aviso y comunicación, que explica a qué servicio dirigirse ante un ataque o situaciones de peligro, y uno de actuación ante daños al ganado, que detalla cómo actuar para proteger a los animales que han quedado heridos, qué hacer con los cadáveres y cómo preservar el escenario del ataque y procedimiento para toma de muestras.

Su objetivo es proteger de forma más eficaz al ganado, permitir realizar un seguimiento del depredador para prevenir otros ataques y detectar la presencia de perros asilvestrados para evitar la hibridación y convivencia con el lobo, han informado fuentes del Gobierno de Aragón.

Aunque de momento solo se ha detectado un ejemplar en Aragón, la directora general ha enfatizado que este plan de actuación pretende ser "para el futuro", ya que "en otras comunidades autónomas tienen ya manadas completas que están controlando".

Entre las medidas a estudiar que ha planteado antes de la reunión está la "autoproteción", mediante el vallado y cercado, y la compensación por "los gastos, los costes y el estrés que supone para el ganado" este tipo de ataques.

"Lo ideal es adquirir vallado que se pueda mover de un sitio a otro dependiendo de donde se registren los ataques", ha precisado la directora general, quien ha insistido en que "la ganadería extensiva desde el punto de vista de biodiversidad es lo más importante que ahora tenemos".