La fiebre sigue yendo a menos, aunque Aragón es una de las comunidades autónomas donde el vitus está mostrando mayor resistencia. Según los últimos datos publicados por la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Instituto Carlos III, solo Castilla- La Mancha supera los 134,6 casos por cada 100.000 habitantes que registró Aragón la pasada semana.

De hecho, solo en siete comunidades la gripe sigue siendo epidemia. Junto a aragoneses y manchegos, en la Comunidad Valenciana, Castilla y León, País Vasco, Cataluña y la ciudad autónoma de Melilla, el número de casos supera todavía el umbral epidémico. En general, la incidencia del virus en España se ha reducido un tercio en la última semana, hasta los 90 casos por cada 100.000 habitantes.

Castilla-La Mancha registra 145,9 casos por 100.000 habitantes y después de Aragón se sitúa Comunidad Valenciana (127,8), Castilla y León (114,2), País Vasco (105,8), Cataluña (98,7) y Melilla (93,6) como esas comunidades donde la gripe parece haberse hecho más fuerte. Por contra, Madrid (67,7), La Rioja (59,4), Asturias (44), Baleares (30,7) y Ceuta (21,7) son las que tienen una menor incidencia.

POR EDAD

El último informe elaborado por el instituto subraya un relevante descenso de la incidencia del virus en todos los grupos de edad, mientras que los menores de 15 años son los menos afectados.

En Aragón, el boletín epidemiológico elaborado por Salud Pública indica que la difusión geográfica de la gripe «es epidémica, el nivel de intensidad de la actividad gripal es bajo y la evolución decreciente».

Además, respecto a los datos totales, las autoridades sanitarias reflejan que los casos detectados a lo largo del año (18.757) son el doble que los que se preveían a tenor de la incidencia a lo largo de los cinco últimos años (9.611).

España ha notificado hasta ahora un total de 2.259 casos graves hospitalizados confirmados de gripe, frente a los 1.994 que recopilaba el informe anterior, y 298 muertes -casi medio centenar más-.

Los casos más graves se detectan en los grupos de personas de 64 años (74%), seguido del grupo de 45 a 64 años (16%).

El 91% de los pacientes sufría factores de riesgo de complicaciones de gripe, como enfermedad cardiovascular crónica, diabetes o enfermedad pulmonar crónica. Casi el 75% de estos afectados presentó posteriormente neumonía y cerca de 500 tuvieron que ser ingresados en una unidad de cuidados intensivos.

De los 1.834 pacientes pertenecientes a grupos a los que se recomienda ponerse la vacuna, casi la mitad no había recibido el antídoto.