Aragón ha perdido 8.482 habitantes respecto al año pasado y su censo se ha situado en los 1.317.921 a 1 de enero de 2016, según los últimos datos del Instituto Nacional de estadística (INE).

El primer día del año 2015, la comunidad tenía 1.326.403 habitantes, con lo que ha perdido un 0,64 por ciento, lo que la convierte en la tercera autonomía donde porcentualmente se ha registrado una caída mayor, tras Castilla- León (un 0,94%) y Asturias (0,88%).

La Comunidad Aragonesa es también una de las que tiene un saldo migratorio negativo con el extranjero más importante, ya que han salido 4.477 personas más de las que han llegado, sólo por detrás de la Comunidad Valenciana (5.818). Igualmente registra un salgo negativo, en 1.007 personas, con el resto de comunidades autónomas.

En el conjunto de España, la población residente ha descendido en 10 comunidades, mientras que Madrid es la que más habitantes gana por migración exterior e interior. En España, a 1 de enero de 2016, la población residente se situó en 46.438.442 millones de habitantes, 11.142 menos que en la misma fecha del año anterior.

Por comunidades, el mayor descenso poblacional se ha producido en Castilla y León, con una variación anual negativa del -0,94 por ciento sobre el total de residentes, y en Asturias, con un -0,88 por ciento.

Otras ocho autonomías también han visto cómo su población residente bajó al cabo de 2015. Sin embargo, en las demás ha subido el número de residentes, sobre todo en Baleares y en Madrid, con crecimientos del 0,86 y del 0,75 por ciento, respectivamente. Las demás comunidades con mayor población que hace un año experimentan incrementos muy leves: Canarias (0,3 por ciento), Murcia (0,10), Cataluña y Navarra (0,09) y Andalucía (0,03).

En lo que se refiere a la migración exterior, en cuatro comunidades el saldo fue positivo, o lo que es lo mismo: en 2015 llegaron a esas comunidades más personas provenientes del extranjero que las que se fueron a otros países. Esas autonomías son Madrid, con 8.203 personas más; Canarias, 6.419 personas más; Baleares, 4.194 más; y Galicia, 163 personas más.

La ciudad autónoma de Ceuta registró un saldo de 44 personas más.

En las demás comunidades, los números son negativos y se fueron más personas al extranjero: Comunidad Valenciana es la que más población perdió en movimientos migratorios exteriores, con 5.818 personas menos; seguida de Aragón, 4.477 menos; Murcia, 3.066 menos; y Castilla y León, 3.061 menos.

Las migraciones entre comunidades mantienen a Madrid como comunidad en la que más aumenta la población al recibir de otras autonomías 21.809 personas más que las que pasan a residir en otros puntos de España. Cataluña queda lejos, con 3.927 personas más; Baleares, 3.316 más; País Vasco, con 2.036; Navarra, con 1.181; Comunidad Valenciana, con 58; y Canarias, con 38.

En las demás, el número de residentes que se instalan en otras comunidades supera al de nuevos residentes provenientes de terceras autonomías, sobre todo en Castilla-La Mancha, que pierde 8.638 personas. Por continentes, la mayor parte de los nuevos nacionales proceden de Sudamérica (52.191), una cuarta parte de ellos se instalaron en la Comunidad de Madrid (14.487) y casi otro tanto en Cataluña (11.097).

Por países, Marruecos es el lugar de donde proceden más extranjeros que han adquirido la nacionalidad y que se han decantado, sobre todo, por Cataluña (4.579), Madrid (2.048) y Andalucía (1.747). Otros 1.564 marroquíes optaron por la Comunidad Valenciana; 734 por Murcia; 551 por Castilla-La Mancha; 484 por Baleares; 473 por canarias, y 431 por el País Vasco.

De Ecuador llegaron 12.169 personas, 3.827 a Madrid; 2.480 a cataluña; 1.457 a Comunidad Valenciana; 1.380 a Murcia, y 709 a Andalucía (donde la nacionalidad preferente de los sudamericanos que han llegado es boliviana, con 1.114 instalados).