Solo en Aragón, desde el 2013 se han registrado cerca de un centenar de denuncias por casos de maltrato en ancianos cada año, aunque desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) se estima que solo el 10% de las víctimas llega a denunciar.

Debido a esto, el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud (IACS) formará a más de 125 profesionales sanitarios aragoneses para detectar de forma precoz los casos de maltrato en ancianos antes de que acabe el año.

Según ha explicado el Gobierno de Aragón en nota de prensa, el objetivo es frenar este fenómeno emergente desde las propias consultas dotando a los trabajadores de los centros de Atención Primaria y Especializada de los conocimientos necesarios para intentar acabar con este problema.

Los cursos, uno de los cuales empieza este lunes, capacitará a los profesionales para identificar los recursos con los que cuenta Aragón para intervenir en los supuestos casos. Una formación que completa la guía que la DGA ha editado para residencias de cara a identificar este grave problema.

Según la OMS, casi el 16% de las personas mayores de 60 años han sido sometidos a algún tipo de abuso psicológico (11,6%), abuso financiero (6,8%), negligencia (4,2% ), el abuso físico (2,6%) o el abuso sexual (0,9%). «El abuso de ancianos rara vez se discute en los círculos políticos», añade el doctor Etienne Krug, director del Departamento de la OMS para el tratamiento de las enfermedades no transmisibles, Discapacidad, Prevención de Violencia y Lesiones. En su opinión, «los gobiernos deben proteger a todas las personas de la violencia», por tanto, propone trabajar para «arrojar luz» sobre este «importante reto social», entender la mejor manera de prevenir el abuso. Para el año 2050 el número de personas de 60 años o más se duplicará para llegar a 2 mil millones a nivel mundial, una gran mayoría de las personas mayores vivirán en países de bajos y medianos ingresos.

Si la proporción de víctimas de maltrato a ancianos permanece constante, el número de personas afectadas se incrementará rápidamente debido al envejecimiento de la población, con un crecimiento de 320 millones de víctimas en 2050.