El pequeño gesto de apagar la luz puede tener una gran repercusión para el planeta. Por eso ayer Aragón, siguiendo la estela de la campaña promovida por World Wildlife Fund (WWF) contra el cambio climático, se sumó a la conocida ‘La hora del planeta’ con el apagón, durante una hora (entre las 20.30 y las 21.30), de varios edificios emblemáticos. La comunidad compartió esta iniciativa solidaria junto a 7.000 ciudades de 178 países.

En Zaragoza, se quedaron prácticamente a oscuras la sede del Gobierno de Aragón en el Edificio Pignatelli, la fachada principal del Ayuntamiento de Zaragoza o el palacio de La Lonja.

En el campus

La Universidad de Zaragoza dejó sin iluminación exterior el Paraninfo, con el fin de mostrar que desde la institución «se trabaja firmemente contra el cambio climático». Desde el campus aragonés, la Oficina Verde trabaja en la sensibilización medioambiental fomentando y explicando a toda la comunidad universitaria cómo se debe actuar contra el cambio climático y como debemos adaptar la forma de vida actual hacia el respeto al medio ambiente y la sostenibilidad del planeta.

Por otro lado, Adif dejó sin luz sus fachadas y rótulos en las estaciones de Zaragoza-Delicias y Teruel, pero también Carrefour, Puerto Venecia o El Corte Inglés se sumaron a la iniciativa. Huesca y Teruel, por su parte, apagaron sus edificios públicos.

El 2016 fue el año más cálido registrado desde 1880. El cambio climático es ya evidente en todo el Planeta y, especialmente, en regiones como el Ártico. Por otro lado, el 4 de noviembre del 2016 entró en vigor el Acuerdo de París para frenar este probema en el planeta mediante un acuerdo mundial que marca un punto de inflexión y el comienzo de una transición.