Los cerca de 30.000 pacientes aragoneses que sufren hepatitis reclamaron ayer, con motivo del Día Mundial de la enfermedad, un "mayor acceso" al tratamiento que se dispensa a nivel nacional y que en Aragón, debido a su alto coste, no es sufragado por el Departamento de Sanidad.
"Su curación está en torno a un 95%, pero doce meses de terapia cuestan 60.000 euros y la DGA, tal y como están las cosas, no se compromete a ello", explicó ayer Miguel Barrachina, presidente de la Asociación de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Aragón.
De momento, tal y como confirmó Barrachina, esta medicina, que se puso en circulación el pasado mes de enero, se aplica en Aragón "solo" en casos extremos. "Se solicita a la DGA, bien desde el hospital Miguel Servet o desde el Clínico, lo que se llama tratamiento en uso compasivo, para enfermos que están muy mal. Se han pedido ocho dosis a Sanidad, para que lo tramite con el Gobierno central, pero de momento solo se está aplicando en un paciente", expone.
1 DE AGOSTO Ante esta situación, Barrachina, en nombre de todos los afectados aragoneses, apuntó que "es lamentable" que "solo se de vía libre a la medicación cuando se está a punto de fallecer" y reclamó que "debería ser un tratamiento igual para todos, porque todos somos enfermos", señaló.
Mientras tanto, en los centros hospitalarios de Aragón se sigue el parámetro de la triple terapia, que tiene un 80% de curación. "Se da Boceprevir y Telaprevir, pero la curación no es tan alta", aseguró.
Ante las dificultades que presenta el Departamento de Sanidad para aplicar los tratamientos nacionales, desde la la Asociación de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Aragón esperan "con ilusión" la entrada en vigor de un nuevo tratamiento el próximo 1 de agosto y que, según adelantó Barrachina, su precio es "más asequible", por lo que tienen puesta su "confianza" en el ramo dirigido por Ricardo Oliván. "Un tratamiento de doce meses costaría 25.000 mil euros, es decir, menos de la mitad de lo que cuesta ahora. Su efectividad es de un 90% de curación y Madrid ya ha dado la orden de que se podrá prescribir este medicamento en cualquier comunidad", explicó el presidente del colectivo de hepáticos.
"Si pasan los meses y en Aragón no se aplica, pese a que la cuantía sí que podría ser asumible para Sanidad no solo en casos extremos, la culpa será del Gobierno de Aragón. Confíamos en que sí que sufraguen el tratamiento", matizó Barrachina.
Según los datos ofrecidos por el último Boletín Epidemiológico la semana pasada, Aragón registró en el 2013 un total de 68 casos de hepatitis B, de los que 60 (88%) se notificaron en la provincia de Zaragoza, 5 en la de Huesca y 3 en la de Teruel.
