Dos robos en dos fines de semana consecutivos, con unos 125.000 euros de pérdidas --arreglos aparte-- han convencido a Aramón de la imperiosa necesidad de mejorar sus protocolos de seguridad. Ayer, según fuentes del grupo, los máximos responsables del ente gestor de las estaciones de esquí aragonesas (salvo Astún) se reunieron con la empresa de vigilancia que tienen contratada para reforzar la seguridad y modificar los protocolos.

Desde Aramón declinaron aclarar, lógicamente, en qué consistirán estas mejoras, pero sí puntualizaron que el sistema de recogida y traslado del dinero ya incluía cambios aleatorios de recorrido. Al parecer no han sido suficiente para despistar a la banda que actuó el domingo en Formigal.

La Guardia Civil, en colaboración con el Cuerpo Nacional de Policía en Jaca, continúa investigando las circunstancias de este robo. Dos individuos encañonaron a dos empleados de la estación --un recaudador y un miembro de seguridad-- en el aparcamiento de Anayet y se hicieron con los 24.000 euros en efectivo que portaban. Se trataba de la recaudación que habían ido recogiendo de terminal en terminal de la estación. Los atracadores obligaron a los empleados a subir a su coche y les trasladaron unos 12 kilómetros hasta el desvío de Panticosa, donde, tras atarles y dejarles en su coche, huyeron con otros dos compañeros.

Según aseguraron ayer fuentes de Aramón, los dos empleados se encuentran en buen estado, pese a la paliza que al parecer le dieron a uno de ellos antes de atarle, según trascendió anteayer. No confirmaron, en cualquier caso, si han podido reincorporarse a su puesto.

Este atraco con secuestro en Formigal llegó una semana después del asalto a la estación de Valdelinares, por el procedimiento del butrón. El botín fue bastante más lucrativo, de unos 100.000 euros, y los ladrones accedieron al edificio de servicios en la noche del domingo al lunes. Después, según todos los indicios, robaron también la recaudación de las tragaperras en un restaurante de La Puebla de Sarrión, ubicado en el camino de la A-23. La Guardia Civil no confirmó si sospecha que ambos asaltos estén relacionados.