Desde ayer subir al tranvía tiene un aliciente distinto a llegar pronto a trabajar o estudiar. La línea Valdespartera-Parque Goya de Zaragoza ofrece, una vez al día, una visita guiada por la arquitectura más emblemática de la ciudad que adorna su trayecto a lo largo de sus 12,8 kilómetros de longitud. Edificios con nombre y con una historia que no todos los ciudadanos conocen, se cuelan por las ventanas a través de un mensaje acústico que explica algunos de sus datos más relevantes.

El decano del Colegio Oficial de Arquitectos de Aragón (COAA), Ricardo Marco, destacaba que esta iniciativa «se enmarca dentro de lo que es la semana de la arquitectura, con motivo del día internacional que se celebra el primer lunes de octubre de cada año», en un programa de exposiciones y eventos que se rubrica con esta idea «interesante» porque se trata de «enseñar la historia de la ciudad» a través de esos «54 edificios que se pueden visualizar» desde dentro.

Para el sector, supone «dar un aldabonazo» en un tranvía que sugiere, a quienes lo deseen, conocer todos ellos en un «itinerario de 45 minutos», que es lo que tarda en ir desde Valdespartera a Parque Goya, aunque son conscientes de que pocos realizan el recorrido íntegro.

«No solo se trata de edificios antiguos, sino también de arquitectura contemporánea», añadía, que es la «asignatura pendiente» de la ciudadanía, conocer muchos de los edificios que son especialmente significativos y que, con el trasiego del día a día pasan muchas veces desapercibidos. La iniciativa ha sido bautizada como Tranvía-arq, e invita a subir, mirar y conocer a bordo de un Urbos 3 a través de esta didáctica que para los arquitectos puede suponer «un inicio prometedor» de cara a visibilizar su trabajo.

Lleno de iconos de ciudad

El hecho de que el tranvía atraviese Zaragoza de norte a sur descubre al pasajero más de medio centenar de obras de renombre. Pasar por el centro es un lujo para los apasionados de la arquitectura. Solo había que ponerlos todos en un mapa, que ahora adornan cada parada del tranvía, y adentrarse en su historia a través de una visita guiada en un viaje cotidiano en transporte urbano. Lo difícil es acertar, ya que cada día solo uno de los convoyes lleva este atractivo adicional. El primero, ayer, salía a las 10.50 horas de cocheras. Pero la ventaja es que solo en un viaje el mensaje puede llegar a miles de personas, dependiendo de la afluencia de ese día.

Edificios ya muy conocidos como el Paraninfo, el Torreón de la Zuda, el hospital Miguel Servet, la Cámara de Comercio, el Mercado Central, el palacio de la Audiencia o el Torreón de la Zuda están en un itinerario por la Zaragoza más clásica que todo turista bien informado suele conocer. Y junto a ellos, iconos de la ciudad contemporánea que representan otros como el World Trade Center, la nueva Escuela de Artes o las viviendas de Villa Expo en la avenida de Ranillas.

Son solo cuadros a los que mirar desde el ventanal transparente del Urbos 3 mientras una voz explica sus datos más relevantes que le convierten en emblema. Y, si sabe a poco, se puede consultar en internet, en la web creada para esta iniciativa.

Se hace de forma conjunta con el Ayuntamiento de Zaragoza y Tranvías de Zaragoza. Para el consistorio servirá «para poner de relevancia el gran revulsivo» que fue la línea norte-sur, como la arquitectura, destacaba en su estreno la concejala de Movilidad, Teresa Artigas. Para la sociedad mixta, según su gerente, Ana María Moreno, «hay veces que por el movimiento de la vida diaria no nos damos cuenta de lo que tenemos cerca», Así se le acerca al viajero la arquitectura, en su vida cotidiana, donde la rutina deja poco espacio para el arte.