La Asociación de Afectados por las riadas del río Ebro (Asafre) ha reiterado su exigencia de realizar dragados y una limpieza del cauce del río Ebro y sus afluntes, en lo que considera una defensa de «los intereses de nuestros vecinos y productores de alimentos». Asafre ha recordado también la intervención «antinatural» en el río Arga a partir del año 1966, que produjo «un arrastre de gravas de más de diez millones de metros cúbicos». Unos residuos que, según este colectivo, ha llegado a Mequinenza.