Para los socios de Gobierno en el Ayuntamiento de Zaragoza, PSOE y CHA, la Navidad comenzó el viernes. Después de dos frenéticas semanas de reuniones, comidas de trabajo y encierros en los despachos, el equipo municipal ha logrado poner encima de la mesa el borrador de los presupuestos para el 2004. El día de Nochevieja, después de su aprobación en el pleno, los concejales podrán respirar tranquilos y brindar por haber cerrado las cuentas antes de comenzar el nuevo año.

Ahora, con el texto en el cajón y la seguridad que otorga el disponer de mayoría en el pleno para sacarlo adelante, los responsables de cada área municipal hablan de "satisfacción", aunque en voz baja se reconoce que no es el que les hubiese gustado como primer proyecto político. Durante seis días, la comisión negociadora formada por técnicos y políticos de los dos partidos mantuvieron largas reuniones en las que no faltó el café. Mañana y tarde encerrados, las únicas pausas que se concedían eran para comer rápidamente un bocadillo en compañía de los compañeros de partido para informar o consultar rápidamente de los avances en la negociación. "No han sido muchas las reuniones pero sí muy intensas, en alguna ocasión el reloj llegó a dar las once de la noche y ahí se seguía, que si esto sí y que si esto no", explicaba un funcionario municipal.

Tanto PSOE como CHA coinciden en que ha habido "buen ambiente" en las negociaciones. "Más que nada porque todos sabíamos que apenas había dinero para invertir. Entre los gastos fijos de personal y los proyectos heredados del PP, el presupuesto que quedaba para nuevas inversiones se quedaba en nada y como los dos partidos teníamos claro que Acción Social y barrios se iban a potenciar, apenas había discusión", apuntaba Carmen Dueso, la teniente de alcalde de Hacienda.

En los pasillos se comenta que lo duro no ha sido el cara a cara con el socio de Gobierno sino las propias negociaciones internas de cada área, entre los miembros del mismo grupo. "Las partidas para la Expo, el tranvía, las reformas de grandes avenidas o el plan de riberas, es decir, los temas gordos, se pactaron en apenas tres días. Lo complicado fue la distribución que cada teniente de alcalde tuvo que hacer entre sus concejalías", indicaron.

En Acción Social, aun tratándose de una de las áreas privilegiadas en las que más ha aumentado la inversión con respecto al 2003, Mar Herrero aseguraba que las reuniones fueron constantes. "Estaba todo tan ajustado que no había ni una partida de la que poder rascar y mucho menos eliminar, hemos tenido unas cuantas comidas y muchos cafés antes de cerrar la carpeta", decía.

Extraña presentación

La presentación del borrador definitivo en un viernes por la tarde (fuera del horario del consistorio) y la previsión de aprobarlo cinco días más tarde con un fin de semana de por medio ha provocado las críticas de los partidos de la oposición. En opinión del PP, la acción se ha realizado "con premeditación y alevosía", para evitar que los grupos dispusieran del tiempo suficiente para estudiarlo.

El equipo de Gobierno lo niega. "No ha habido ningún tipo de intencionalidad. Se ha presentado el texto cuando se ha cerrado definitivamente y ha coincidido con los últimos días del año", dijeron. Será el día de Nochevieja cuando salga adelante el presupuesto. En principio se habló de celebrar el pleno en enero, pero al final han optado por acelerar los plazos para no tener que recurrir a prórrogas presupuestarias. "Hay que ser serios, el año empieza el día 1 de enero, no a mitad del mes de marzo o abril".