Han hecho un largo camino desde su fundación. Camino para luchar contra una serie de enfermedades, a veces, poco comprendidas... Por buscar respuestas a través de la investigación. La Asociación Española del Sueño (Asenarco), acaba de dar un paso más en la difusión de su trabajo y su actividad.

Esta semana inauguraban nuevo rastrillo. Y lo hacían estrenando, en ese mismo acto, su propio premio. Un nombramiento de honor a una profesional aragonesa, la doctora María Ángeles Cid, que ha abierto brecha en muchos terrenos (relacionados con el estudio del sueño y con la propia profesión sanitaria). Virgilio Vicente García, presidente de la Asociación Asenarco, y María José Serrano, que fue responsable de la misma durante los primeros años, se reunieron en la sala Venecia de Zaragoza para hacer entrega de la distinción. Lo hicieron ante un pequeño ejército de voluntarias, que se calzaron delantal rojo para vender todo lo que haga falta. No podía haber mejor público, sobre el escenario. Allí, Virgilio Vicente García y María José Serrano recordaron la trayectoria de la premiada. Como primera mujer que se convirtió en jefe de servicio en un hospital aragonés (en su caso, el Miguel Servet de Zaragoza) y también por su "trayectoria profesional, que la ha convertido en un claro referente en el campo de la neurofisiología clínica y por su colaboración desinteresada con esta entidad". La propia premiada agradeció las palabras, el nombramiento como socia de honor, la acogida... La guinda fue un brindis para inaugurar el rastrillo, que seguirá abierto hasta el 6 de diciembre (para que vayan y vean). Y para cerrar una lupa difícil por una pedazo de mujer. Qué les voy a decir (y aquí va el chascarrillo)... Si de la doctora Cid heredó el 50% de los genes esta lupera...