La atención de personas en las urgencias hospitalarias por patologías relacionadas con el calor aumentó este verano en Aragón un 42%, según el balance del Plan de Acción sobre efectos de las temperaturas extremas.
Entre junio y septiembre se registraron 109 atenciones en urgencias hospitalarias vinculadas a las altas temperaturas frente a las 77 del año anterior, y en dos casos fue necesario el ingreso, mientras que no se ha notificado ningún fallecimiento directamente relacionado con las altas temperaturas.
De las 109 atenciones, 67 se produjeron en el mes de junio, el 61% durante todo el periodo.
Durante este verano, las temperaturas máximas y mínimas en las tres capitales de provincia han estado por encima de la media en junio, julio y agosto, lo que ha podido influir en esa mayor demanda de asistencia en urgencias hospitalarias, especialmente en junio y en Zaragoza capital. Esta es una de las principales conclusiones que recoge la dirección general de Salud Pública en el balance del plan de acción sobre efectos de las temperaturas extremas, que estuvo activado desde el 1 de junio al 15 de septiembre.
Las temperaturas máximas y mínimas en las tres capitales de provincia han estado por encima de la media, excepto en el mes de septiembre, que ha tenido temperaturas muy inferiores a las esperadas.
Comparadas con los datos de los últimos cinco años, en Huesca capital las urgencias hospitalarias han superado el umbral superior de casos atendidos en 5 semanas de 15 (33%); en Teruel en 9 semanas (60%), y en Zaragoza capital, en 10 semanas de 15 (66%), con valores por encima de la media en todo el periodo.
La mortalidad para todas las edades se ha mantenido dentro de los intervalos esperados en las tres capitales, con la excepción de las semanas del 19 al 25 de junio y del 31 de julio al 6 de agosto en Zaragoza capital.