El cauce del Ebro en su tramo final empieza a estabilizarse, ya que el caudal que sale del embalse de Mequinenza es superior al que entra en el pantano, aunque hasta que la situación no se regularice totalmente los pantanos del sistema Mequinenza-Riba-roja-Flix siguen desembalsando a 1.800 m3/s.

Según ha informado Protección Civil, que cita al Sistema Automático de Alertas Hidrológicas (SAIH) de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), el nivel del río a su paso por Ascó es esta mañana de 5,36 metros, ligeramente inferior a los 5,38 metros que alcanzaba ayer por la mañana.

Por la estación de aforo de la población de la Ribera del Ebro el caudal es de 1.844 m3/s, mientras que en Tortosa, la altura del río alcanza los 5,53 metros y el caudal es de 1.808 m3/s.

A pesar de que la situación tiende a normalizarse, Protección Civil de la Generalidad mantiene activado el plan INUNCAT en situación de alerta.

El sindicato agrario Unió de Pagesos (UP) ha hecho un reconocimiento de las riberas del río para determinar los daños que ha provocado la crecida en los campos de cultivo, especialmente en los campos de naranjos, en la huerta y en otros sembrados de las zonas bajas del Ebro.

En la comarca de la Ribera de Ebro, en los alrededores de Miravet, "la crecida del río también ha inundado zonas de árboles frutales", según UP.

Como ya han hecho los alcaldes de la zona, Unió de Pagesos ha lamentado que la CHE "no haya actuado con suficiente diligencia y rapidez a la hora de prever la crecida del río".