El Ayuntamiento de Zaragoza acata el auto de la jueza de lo contencioso-administrativo que ha suspendido un acto de mañana a favor del referéndum en Cataluña, pero considera que se trata de "una barbaridad jurídica" por cuanto prejuzga hechos no ocurridos y rompe la libertad de expresión.

Así se ha expresado el portavoz de gobierno del consistorio y consejero de Hacienda y Cultura, Fernando Rivarés, en conferencia de prensa, convocada horas después de conocerse el auto de una magistrada del Juzgado Contencioso-Administrativo número 5 de Zaragoza que prohíbe un acto programado para mañana.

Acto organizado por las Marchas por la Libertad en el Centro Cívico Delicias para crear una charla-debate favorable a la celebración en Cataluña de un referéndum por la independencia.

El grupo del PP en el Ayuntamiento recurrió el permiso dado por el Ayuntamiento por cuanto se trata de instalaciones de titularidad municipal que, argumentaban los populares, se iban a ceder a un evento "ilegal".

Rivarés ha defendido que el gobierno del Ayuntamiento, de Zaragoza En Común, concediera la autorización, ya que la petición la cursó una entidad "legalmente constituida", los informes técnicos fueron favorables, y finalmente, se firmó el permiso atendiendo a la salvaguarda de la libertad de expresión y del derecho de reunión.

Es el proceder de los ayuntamientos, ha dicho el consejero, para quien, además, en este caso de Las Marchas por la Dignidad, la petición se formuló dentro de los márgenes democráticos.

Ha añadido que tanto el derecho de reunión como la libertad de expresión son "básicos e intocables", y consagrados en la Constitución, de modo que la cancelación del acto de mañana resulta, ha dicho, "un atropello" a ambos derechos.

También ha opinado que el auto de la jueza resulta una "barbaridad jurídica" por cuanto, ha explicado después de leer al pie de la letra unas líneas del auto, da a entender la magistrada que hay por parte del consistorio una adhesión a la corriente que pide un referéndum en Cataluña.

Rivarés, en este sentido, con ironía, se ha preguntado si el Ayuntamiento de Zaragoza En Común, al dar permisos a Pedro Sánchez para hacer un acto dentro de las primarias socialistas, o al PP para que Mariano Rajoy ocupe el Auditorio en un mitin electoral, es por ello "sanchista o 'pepero'".

Las concesiones de licencias para actos en espacios municipales se plasman, según sus palabras, sin tener en cuenta lo que se diga o se haga en ellos, a no ser que suponga un atentado o una amenaza a derechos fundamentales.

"Al Ayuntamiento ni le va ni le viene" el contenido de los eventos para cuya celebración da permisos, ha sentenciado.

El concejal, además, ha abogado por que no haya "más derivas agresivas" o "más violencia verbal". "Mientras sigamos con sentencias que prohíben el derecho a opinar, estamos impidiendo la convivencia y agitando violencia", ha apostillado.

Asimismo, sobre la huelga del tranvía durante las Fiestas del Pilar, Rivarés ha insistido en que el gobierno municipal sólo puede mediar para evitar la huelga, sin cabida para casi nada más, ya que las empresas responsables mayoritariamente de este servicio, y el de autobuses, son privadas.