La Junta de Gobierno del ayuntamiento bilbilitano aprobó ayer un acuerdo por el que da a UGT un ultimátum para que abandone el edificio propiedad municipal en el que tiene su sede. Este inmueble perteneció al antiguo Sindicato Vertical y fue cedido tras el franquismo a esta delegación sindical como sede. La Comunidad de Regantes abrió un contencioso judicial sobre la propiedad del inmueble en el que se acabó determinando que correspondía al Ayuntamiento de Calatayud.