El consejero municipal de Urbanismo y Sostenibilidad, Pablo Muñoz, ha dado cuenta hoy de la aprobación por parte de la Gerencia de Urbanismo del convenio con Iberebro, empresa que promueve el "outlet" de Torrevillage, por el que el Ayuntamiento recibirá 2,7 millones por los aprovechamientos urbanísticos.

En rueda de prensa, Muñoz ha explicado que se ha exigido dicho pago a la empresa y que finalmente han primado las pretensiones del Consistorio frente a las de la compañía, que planteaba abonar 922.833 euros en su primer ofrecimiento.

El Ayuntamiento tiene previsto destinar ese dinero a acciones en favor del pequeño comercio, como el arreglo de calles y la reforma de alumbrados, ha indicado.

Mediante este acuerdo, además, Iberebro renuncia al recurso contencioso-administrativo que había planteado.

Por otro lado, Muñoz ha informado de que hay acuerdo entre el Consistorio y ADIF para los suelos de la sociedad Zaragoza Alta Velocidad en El Portillo, por el que el Ayuntamiento podrá pasar a ocupar la parte superficial, mientras el subsuelo permanece como uso ferroviario.

A falta del visto bueno del órgano de gobierno de ADIF, estas zonas podrían pasar a incorporarse a la ciudad, si bien el consejero ha afirmado que no ocurrirá todavía en un futuro "inmediato", sino a medio plazo.

En otro orden de cosas, el consejero se ha referido también a la Operación Baldosa, que fue recurrida y quedaron finalmente 850.000 euros para actuaciones en asfaltos y aceras.

Ha destacado las reformas en calles como Espartero, Paseo de la Mina, Miguel Servet, Roger de Flor, Ramiro I de Aragón, Escultor Palao, Plaza Tenerías, Santo Dominguito de Val o Trinidad.

Concretamente, en las obras realizadas en el Casco Histórico se ha seguido la filosofía de desincentivar al máximo posible a los residentes el tráfico privado en esta zona de la ciudad.