Un ciudadano francés de 38 años falleció anteayer por la tarde al sufrir una caída de unos 25 metros mientra practicaba barranquismo en la localidad oscense de Bárcabo, en el Sobrarbe. La Guardia Civil y los servicios de emergencias del 112 Aragón colaboraron en su rescate, pero tras semejante caída, ocurrida cuando hacía rápel, nada pudieron hacer salvo certificar el fallecimiento.

El accidente ocurrió poco antes de las 17.40 horas de anteayer, cuando la Guardia Civil recibió la primera llamada del 112 informando de que un barranquista francés se había despeñado durante el primer tramo de rápel (descenso con cuerda por un cortado) del barranco Portiacha, en Bárcabo. Cuando se efectuó la primera llamada el hombre estaba inconsciente pero aún respiraba, según los acompañantes que llamaron.

El instituto armado desplazó al lugar al helicóptero de la Unidad Aérea de Huesca, el Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de la capital oscense y el médico del 061. El helicóptero aterrizó en el párking del mirador del río Vero, cercano a la zona del accidente, y dio aviso al helicóptero medicalizado del 112, para que interviniera dada la gravedad de las lesiones.

Mientras, un especialista de montaña y el médico bajaron haciendo rápel hasta el herido, para intentar estabilizarle antes de que llegase la aeronave equipada. A esas alturas el hombre ya no respondía a ningún estimulo, y pese a que la doctora le suministró oxigeno y realizó la reanimación cardiopulmonar, también con desfibrilador, no respondió.

Aun así los especialistas le introdujeron en la camilla y le izaron con la grúa del helicóptero, trasladándole al aparcamiento donde ya esperaba el medicalizado. Pero los sanitarios no tuvieron mejor suerte a la hora de practicarle la reanimación, y finalmente tuvieron que certificar su fallecimiento. El cuerpo fue trasladado hasta el hospital provincial de Huesca, a la espera de la autopsia.

El accidentado es la primera víctima mortal de esta campaña estival en Huesca, tras un periodo invernal en el que se han registrado siete fallecidos. Precisamente, hace unos días la Guardia Civil daba a conocer los datos de esta última campaña, en la que los rescates han descendido un 34%, reducción que se atribuye a una menor afluencia de personas por el mal tiempo.