El exministro de Justicia e Interior Juan Alberto Belloch cree que, si pudiera, Pedro Sánchez debería agotar la legislatura, pero lo ve difícil porque el PP y Podemos no pueden permitir ni que "se consolide un Gobierno bueno" ni que el PSOE "recupere votantes desencantados".

Así se ha manifestado en una entrevista concedida a Efe preguntado por el Gobierno configurado por Pedro Sánchez, "el mejor gobierno socialista que he conocido", ha asegurado, después de los de Felipe González, que para Belloch "fueron los mejores".

Con "alguna excepción", Belloch considera que la plana ministerial que ha conformado Sánchez es "un gran gobierno" y "de tal calidad" que le hace intuir que el jefe del Ejecutivo "lo tenía pensado y hablado desde hace mucho tiempo" y demuestra por su parte una "racionalidad extrema".

Para el actual magistrado de la Audiencia de Zaragoza, se trata de gente "muy preparada, con un gran nivel profesional que no viene para ganar nada propio ni personal sino con ideas, criterio y formación" y por eso cree que "sería una pena que durara menos porque si le dejan hará muchas cosas positivas".

Pese a la debilidad del PSOE en cuanto al número de diputados en el Congreso, Belloch destaca como "ventaja" que no es previsible que pueda sufrir otra moción de censura de toda la oposición frente al PSOE, "salvo que hubiera un disparate".

Del ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha recordado que es amigo personal y su "primer alumno que llega a ministro", alguien que es "respetado por todos los profesionales" y que "va a dejarse los cuernos para hacer las cosas bien".

De la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien fue secretaria de Estado de Justicia e Interior y subsecretaria de Justicia durante su gestión, ha destacado que es una persona "enérgica, valiente, fuerte y de las que agotan a sus colaboradores".

Le ha llamado la atención el nombramiento del "astronauta" Pedro Duque como ministro de Ciencia, alguien que, ha asegurado, "siempre" le había caído "realmente bien", que también cae bien "a casi todo el mundo", que habla con una sinceridad "anglosajona" y "explícita" y que "si le dan tiempo puede revolucionar el sector".

Eso sí, también le ha sorprendido la aceptación de algunos cargos no solo por el plazo para el que está configurado sino porque que "de ministro se gana menos que de magistrado" y porque "ahora la política se ha embarrado demasiado", no ofrece "ninguna compensación inmaterial". "Está llegando a un nivel tan negativo que solo entrarían en política los personajes de segunda división", ha lamentado.

También ha afirmado desconocer por qué no se ha contado con ningún político aragonés cuando hay "gente valiosa, de nivel equivalente e incluso mejor".

Por su parte, ha zanjado con un "no rotundo" su intención de volver a la política nacional porque lo que él creía que podía contribuir a hacer, tanto desde el Ministerio de Justicia e Interior como desde la Alcaldía de Zaragoza, lo ha hecho y ahora, ha dicho, "hace falta gente más nueva, con capacidad de ilusionar porque sin ese factor no vale la pena dedicarse a la política".