Teruel y Alcañiz han cerrado filas en defensa de sus respectivos paradores, que el viernes y el sábado harán huelga, al igual que el de Bielsa, en el Pirineo oscense. En la capital turolense, su alcalde, Manuel Blasco, se reunió ayer con los representantes sindicales de los trabajadores del complejo hotelero y les mostró su apoyo y el de la corporación. El delegado de Personal, José María Villarejo, y la secretaria de CCOO, María Luz Benedicto, describieron la situación del parador, que salvo el mes de noviembre es rentable. La reunión con el alcalde es la primera de una serie de citas que se extenderá a representantes del sector de la hostelería así como de organizaciones empresariales.

El alcalde expresó a los representantes de los trabajadores la oposición al cierre, que también será plasmada por los órganos del ayuntamiento, primero en la junta de gobierno que se celebrará el lunes 10 de diciembre y previsiblemente en el pleno que tendrá lugar antes de finalizar el año para la aprobación de los presupuestos municipales.

El turismo, afirmó el alcalde, es un sector estratégico y los datos económicos del parador de Teruel "no son ruinosos", sino todo lo contrario. En opinión del regidor, el parador de la capital es sostenible y se deberían buscar soluciones menos drásticas que el cierre y el despido de la plantilla de 36 trabajadores. Blasco informó que ya están trabajando sobre este asunto tanto la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, como los diputados Carlos Muñoz y Santiago Lanzuela.

APOYO DE LA DPT En este mismo sentido se pronunció la presidenta de la Diputación Provincial de Teruel, Carmen Pobo, que extendió el rechazo al cierre del parador de Teruel al temporal del de Alcañiz, ya que gracias a Motorland tiene una ocupación casi total todos los fines de semana del año y un nivel de uso medio del 65%.

Pobo insistió en el carácter estratégico del turismo en la provincia, lo que se refleja en el apoyo que recibe del Fondo Especial de Inversiones de Teruel, que sostiene y lanza proyectos turísticos y hosteleros de iniciativa privada. Por ello, para la presidenta de la DPT el cierre definitivo del parador de Teruel y el temporal de Alcañiz serían "una contradicción" con esa política.

Por su parte los trabajadores se concentraron a las 8.30 ante el ayuntamiento en apoyo de los representantes sindicales cuando estos se reunían con el alcalde. Y volvieron a hacerlo a las 11, en el mismo parador.