Es una de las estrellas del Somontano. Una buena uva que le ha dado muchas alegrías a Viñas del Vero (y hasta el primer galardón que obtuvieron como bodega, allá por 1993). Hace 125 años que la variedad chardonnay llegó al Somontano. Y ayer, la firma lo celebró con una cata vertical dedicada a esta variedad en el Novodabo de Zaragoza. Una ocasión única para ver cómo han evolucionado sus chardonnays en el tiempo y para la que rescataron añadas que ya solo conservan en el museo (como las de 98, el 2001 y el 2004). José Ferrer, enólogo y gerente de Viñas del Vero, dirigió la cata, acompañado de parte del equipo de la bodega y de González Byass (desde Diego Mur a Leticia Sánchez Lara, pasando por la responsable del márketing del grupo, Amparo Cuéllar, o el delegado comercial en Aragón, José María Salas). Y lo hizo ante expertos del buen comer y periodistas, en un recorrido desde los vinos del 2016 y 2017, a los de aquel 2004 en los que Zaragoza fue elegida para la Expo. En otra muestra, la de 1908, ya se sirvió un champagne del Somontano que era chardonnay. Haciendo historia, para brindar por ella..