La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, aseguró ayer que espera que la Renta Social Básica se apruebe con urgencia para poder aplicarla inmediatamente.

Broto realizó esas declaraciones tras inaugurar el curso La Renta Social Básica en Aragón de la Universidad de Verano de Teruel que reunió como ponentes a expertos y diferentes cargos vinculados a los servicios sociales de distintas comunidades autónomas y, como oyentes, a trabajadores tanto del Instituto Aragonés de Servicios Sociales como de los centros comarcales y municipales.

Broto insistió en que esta ley "es una apuesta fundamental" del Gobierno de Aragón ya que, dijo, "teníamos claro que debíamos modificar el Ingreso Aragonés de Inserción y adaptar esta prestación a las nuevas características de la sociedad".

Por ello, mostró su deseo de que lo que queda de tramitación parlamentaria sea fácil --actualmente el proyecto de ley se encuentra en proceso de presentación de enmiendas-- porque hay muchas familias que están esperando los cambios, aunque ha puntualizado que le gustaría que hubiera estado aprobada "ya".

La consejera insistió en las novedades que aporta el proyecto de ley de Renta Social Básica y que se fundamentan en que habrá dos tipos de ayudas, unas complementarias para las familias que tengan unos ingresos por trabajo bajos y otras para aquellas personas que no dispongan de ningún tipo de ingreso. A su vez, estas últimas tendrán dos modalidades: para quien quieran participar en procesos de inclusión y para los que no lo hagan.

Destacó, además, el proceso de participación al que se sometió este documento y en el que estuvieron involucradas Administraciones, entidades y colectivos.