Agentes de la Policía Nacional detuvieron en Huesca a ocho miembros de una misma familia dedicada, presuntamente, al tráfico de drogas, en el marco de una operación desarrollada en cinco fases durante las que se produjo el arresto de varios supuestos traficantes en Monzón, Binéfar y Lérida.

A los detenidos se les ha incautado, asimismo, 15.000 euros en efectivo así como una colección numerosa y heterogénea de armas blancas que incluía desde estoques, cuchillos y navajas a puñales de distinto tipo.

Según la Dirección General de la Policía, las detenciones practicadas en Huesca fueron la última fase operación Fragua, desarrollada desde el pasado mes de julio en varias poblaciones altoaragonesas así como en Lérida.

Las ocho detenciones corresponden a una familia cuyos integrantes vivían en un piso en el barrio de Santo Domingo y en una casa de planta baja y corral situada en la zona del Perpetuo Socorro, ambas en la capital altoaragonesa. En el curso de los registros practicados en estos inmuebles, los investigadores se incautaron de un total de 3,8 kilogramos de hojas y cogollos de marihuana ya secados y 182,4 gramos de hachís, según informó la Policía Nacional.

Además, los agentes procedieron a desmantelar un cultivo casero hallado en una de las dependencias del piso y en un invernadero situado en el jardín de la casa donde se cultivaba marihuana.

Todos los detenidos fueron puestos a disposición del titular del juzgado de guardia de la capital altoaragonesa, quien, tras tomarles declaración, les imputó la presunta comisión de varios delitos contra la salud pública por tráfico de sustancias estupefacientes.