El pino negro, el más meridional de Europa, tiene en los montes de la Sierra de Gúdar (Teruel) un refugio que se puede ver amenazado por el cambio climático a pesar de los esfuerzos del Gobierno de Aragón por protegerlo.

Vinculado a la nieve y a la alta montaña, soportando condiciones climáticas extremas en la provincia de Teruel, el bosque de pino negro "Pinus uncinata" más meridional de la Península Ibérica y de toda Europa es "una joya biogeográfica", como la califican desde el Gobierno de Aragón, institución que lleva años protegiendo este patrimonio natural.

El bosque está amenazado por las posibles consecuencias del cambio climático, que puede hacer que se suavicen las condiciones ambientales de estas cumbres turolenses, alerta el Ejecutivo autonómico en un comunicado.

Esto favorecería al pino albar o silvestre y, por lo tanto, que se acelerara el proceso de hibridación y sustitución del pino negro.

A excepción de las poblaciones pirenaicas, únicamente se encuentra de forma natural en el Cerro del Castillo de Vinuesa (Soria) y con una masa forestal de origen artificial -o repoblado- en las elevadas laderas del Moncayo, además de en la Sierra de Gúdar.

El Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón ha cartografiado el bosque de pino negro al detalle mediante GPS, inventariando todas las especies florísticas asociadas; arbóreas, arbustivas y herbáceas.

Los técnicos también han estudiado la evolución que experimenta el pinar y han emprendido actuaciones de conservación in situ mediante ordenación forestal en los Montes de Utilidad Pública.

Además, explican en un comunicado, se han llevado a cabo otras actuaciones de control y de mejora del medio natural en el entorno de la estación de esquí alpino de Valdelinares.

Este es uno de los lugares donde se localiza este pino negro en Teruel, descrito por los primeros botánicos en el año 1941, conocido popularmente como "pino moro".

En total, su distribución en la provincia de Teruel abarca una superficie de 730 hectáreas repartidas en dos núcleos o "rodales".

El primero, más pequeño y puro, de unas 40 hectáreas en la umbría del pico Peñarroya -entre los 1.900 y los 2.028 metros-, y el otro núcleo mayor, de unas 200 hectáreas de superficie, en la zona del Alto del Conventillo, la cabecera del barranco de la Chaparrilla, la Umbría de la Tajera y los alrededores de esta estación de esquí.

Todos estos trabajos han permitido determinar algunas características naturales y silvícolas de las parcelas analizadas y extraer varias conclusiones, añaden las mismas fuentes.

Así, los técnicos han constatado que hay zonas con una predominancia de pino negro superior al 80 %, que existe un bosque maduro con muchos ejemplares de más de cien años y con algunos que llegan a los 300 y que se trata de una masa densa con coeficiente de cabida cubierta del 70 %.

La falta de pastoreo en esta antigua dehesa está dando lugar a la generación de un bosque denso y vigoroso que poco a poco se está recuperando y mejorando hacia un óptimo estado de conservación.

Desde hace más de sesenta años que en la masa boscosa de pino negro o moro de la Sierra de Gúdar no se realiza ningún tipo de corta o de intervención humana apreciable para su aprovechamiento forestal.

Con la Directiva Hábitats del año 1992, el Gobierno de Aragón otorgó protección a esta zona boscosa al incluirla dentro de la Red Natura 2000 de la Unión Europea, declarando el extenso Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) de "Maestrazgo y Sierra de Gúdar".

El Ejecutivo anuncia además que en breve aprobará el Proyecto de Ordenación del Grupo de Montes de Utilidad Pública número 71, 167 y 213, pertenecientes a Gúdar, Alcalá de la Selva y Valdelinares.

Se trata de un documento técnico en el que se caracteriza el hábitat, se fijan medidas de protección y de selvicultura para la mejora de la masa forestal, como es el fomentar la producción de semilla de cara a la conservación de los recursos genéticos que atesora este bosque único.

Además, un rodal maduro del bosque de pino negro de Gúdar es candidato a ser catalogado como "Arboleda Singular" en función del Decreto de 27/2015 del Gobierno de Aragón, inventario en el que actualmente trabajan los técnicos del Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad.