El papel de las mujeres en la ciencia y la promoción de su visibilidad es el objetivo de las actividades que se celebraron ayer en el edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, en las que participaron niñas y mujeres de todas las edades. Esta jornada reivindicativa se suma a las más de ochenta propuestas que se vienen celebrando en Aragón desde que comenzara este mes con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra mañana.

En concreto, el campus zaragozano celebró una actividad en la que medio centenar de niñas de Educación Primaria pudieron conversar con científicas. Además, disfrutaron de un cuentacuentos adaptado a esta temática y degustaron una merienda con las investigadoras. A continuación, una mesa redonda compuesta por las divulgadoras Clara Grima, Lydia Gil, Inés Laura Dawson, Pampa García y Pilar Perla se centró en evaluar el papel de la mujer en la tarea de la divulgación.

No fueron las únicas propuestas que tuvieron lugar ayer con este motivo, puesto que también se inauguró en el Museo de Ciencias Naturales la muestra Evolución en clave de género, que ofrece una visión contestataria al discurso tradicional sobre la evolución humana. En el mismo espacio, además, se pudo dar cuenta de la Visibilidad de las investigadoras, que permite conocer el trabajo de las paleontólogas y geólogas con las piezas que acoge el espacio museístico, gracias a los carteles adjuntos a las mismas que explican estas labores y el currículo de las científicas.

La consejera de Innovación, Investigación y Universidad del gobierno aragonés, Pilar Alegría, destacó la necesidad de incentivar «en edades tempranas» a las niñas el interés por las ciencias y la idea «de que pueden llegar a ser lo que quieran». En ese sentido, señaló que la falta de referentes supone uno de los problemas con los que se encuentran; un obstáculo que no solo afecta a las ciencias, sino que la mayoría de los referentes que se conocen «suelen ser masculinos y, sin embargo, no se ha dado la importancia que se merecían las mujeres», detalló

«Este tipo de actividades nos sirven a las mujeres, y sobre todo a las más jovenes, para saber que pueden llegar a ser grandes científicas. Hay mujeres en todas las ramas del conocimiento que están haciendo una magnífica labor», subrayó. Así, la consejerá recordó que en las universidades hay «muchas más mujeres en los primeros niveles», un número que desciende conforme se avanza hacia los escalafones superiores.