El presidente de Cáritas Zaragoza, Jaime Sanau, y la secretaria general, Cristina García, presentaron ayer la campaña de Navidad en la que certificaron que tener un empleo sigue sin garantizar la cobertura de las necesidades más básicas para muchas personas.

Cáritas Diocesana de Zaragoza ha puesto en marcha esta campaña, Deja tu huella. Practica la justicia, con la que se pretende sensibilizar a la sociedad para recuperar el valor de la dignidad de las personas y velar y hacer posibles los derechos fundamentales.

Sus responsables resaltaron que en lo que va de 2015 --ya que hasta mediado el 2016 no cerrarán el ejercicio con los datos definitivos--, a pesar del "supuesto cambio de ciclo que muestran los datos macroeconómicos", entre las familias más vulnerables que han solicitado el apoyo a la institución casi una de cada cuatro eran nuevas y no lo habían demandado nunca.

En cuanto a ayudas económicas directas para derechos básicos para sobrevivir como la alimentación y la vivienda, el informe de Cáritas señala que se ha alcanzado el mismo nivel que en el 2013, con gastos por encima del 6% de su presupuesto en ambos aspectos.

Cristina García insistió en que desde Cáritas abogan por una implementación de las medidas para abordar de manera estructural la emergencia habitacional y que la entidad ha destinado en concepto de ayudas de alquiler un importe medio de 223 euros para cada familia.

El informe recuerda que, según la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) en Aragón en el 2014 con datos facilitados por Instituto Aragonés de Estadística, la pobreza severa se incrementó en un 20% pasando del 4,44 al 5,34, mientras que la pobreza infantil alcanza el 30,7%, lo que supone siete puntos porcentuales por encima de la media.

"AGILIDAD"

Sanau explicó que "en los últimos tiempos" observan una mayor "agilidad" tanto por parte del Ayuntamiento de Zaragoza como del Gobierno de Aragón, en las concesión de ayudas para alimentación y vivienda que puede incidir en la mejoría de la situación de las familias afectadas.

Otro aspecto que subrayaron es que en Aragón, de los parados que se encuentran registrados, más del 50% no percibe ninguna prestación por desempleo y "es alarmante", dijo Sanau, que haya 29.400 hogares sin ingresos.

En el ámbito rural han constatado desigualdades notables en las cuantías presupuestarias destinadas, así como en las prioridades de actuación y en la organización de programas y prestaciones dirigidos a las personas en situación de pobreza o exclusión social.