El Instituto Confucio de Zaragoza, que iniciará sus clases el próximo mes de septiembre, ya ha registrado cerca de 100 solicitudes para cursar algunos de los niveles de aprendizaje de chino mandarín en Aragón.
«Estamos muy contentos y la verdad que no me esperaba tanta demanda», señaló ayer a este diario Rafael de Miguel, director del centro. Las clases para niños, tanto de Primaria como de Secundaria y Bachillerato, están teniendo mucho éxito y, de hecho, en todas ellas se crearán entre dos y tres grupos (lo mínimo por clase son 15 alumnos).
También en el nivel de adultos principiantes y en aquel que acoge a quienes ya han estudiado el idioma en el centro de lenguas modernas habrá dos grupos. «Nuestra política es que nadie se quede en lista de espera y que este año todo el mundo tenga su plaza», dijo De Miguel.
El director reconoció que las clases de chino comercial para empresas son las que menos demanda han tenido. «Tenemos que darle una vuelta para ofrecer cursos más a la carta», dijo.
