El riesgo de sufrir mutilación genital alcanza a casi 2.000 niñas (1.876) de entre 0 y 14 años en Aragón. Así se recoge en el nuevo protocolo para la prevención y actuación ante la ablación elaborado por el Gobierno de Aragón, que actualiza el del 2011 y se adapta al estatal, vigente desde el año pasado.

La comunidad es la quinta autonomía que tiene mayor población femenina que procede de países de riesgo, donde Gambia, Senegal, Nigeria, Ghana o Guinea son los más comunes.

Además de las niñas, hay 3.195 mujeres por encima de los 18 años que también están expuestas a una posible ablación. En todos los casos son mujeres que, ante un viaje a su país de origen por vacaciones o para contraer matrimonio, podrían sufrir esta práctica debido a las tradiciones de sus países.

El documento de Aragón es más completo que cualquier otro protocolo de España, dado que además de aplicarse en un ámbito sanitario, "alcanza acciones a nivel educativo y sanitario", según explicó ayer Natalia Salvo, directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM).

La mutilación genital se hace en 29 países del África Subsahariana y en algunos de Oriente Medio y Asia. Incluye todas las prácticas que implican la extirpación total o parcial de los genitales femeninos, ya sea por motivos culturales, religiosos o cualquier otra razón no terapéutica. Entre las consecuencias está el dolor intenso, las hemorragias, las infecciones, lesión de órganos o estructuras anatómicas como la uretra o la vagina.

FORMACIÓN

En colaboración con Médicos del Mundo se seguirá formando a los sanitarios de los centros de salud de Aragón, pero también se informará a los docentes en el Centro Aragonés de Recursos para la Educación Inclusiva (Carei) u otros espacios de profesores.

"A veces las niñas les cuentan la situación a sus amigas o a su tutor en el colegio y no podemos permitir que esto pase por algo. El profesor tendrá unas pautas a seguir", explicó Belén Civera, jefa del servicio de Innovación, Equidad y Participación de la consejería de Educación.