El informe sobre pobreza y desigualdad salarial en Aragón, elaborado por Comisiones Obreras con datos de 2015, constata el aumento de la desigualdad durante la crisis y que tener un trabajo "no garantiza salir de la pobreza", con la aparición de la figura del "trabajador pobre".

El informe, que se centra exclusivamente en los trabajadores y los divide en diez partes en función de su salario, indica que se ha pasado de una diferencia de 7 a 1 entre los deciles más alto y más bajo -con una media de 3.700 euros y 492 euros mensuales- antes de la crisis, a otra que supera el 10 a 1 -4.614 frente a solo 460 euros al mes-, con lo que se está "cronificando" la desigualdad.

Según estos datos, el perfil más desfavorecido en el actual mercado laboral sería el de una mujer joven, con contrato a tiempo parcial y empleada en los sectores del comercio, hostelería, hogar, limpieza o vigilancia.

Así, el secretario de Acción Sindical de CC.OO. Aragón, Manuel Pina, ha asegurado que esta nueva realidad es consecuencia de la aplicación de las reformas laborales, especialmente de la última aprobada en 2012, por sus medidas de fomento a la liberalización, el trabajo temporal y la devaluación salarial, que aunque han mejorado los datos del paro en los últimos años crea "peores empleos" con "peores salarios".