Comisiones Obreras y la Unión General de Trabajadores han dado el visto bueno al Plan de Vivienda elaborado por el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza, que prevé invertir 71,5 millones de euros en seis años para la construcción de 308 residencias de alquiler social y la rehabilitación de 842 inmuebles.

Los dos sindicatos han valorado como positiva esta iniciativa, después de reunirse hoy con el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, y el concejal de Vivienda, Pablo Híjar, a quienes han trasladado como petición que se incorporen medidas para garantizar que se cumplen los derechos laborales.

De hecho, según las previsiones del equipo de Gobierno municipal, este proyecto supondrá la creación de cerca de 1.300 puestos de trabajo en el sector de la construcción.

En ese sentido, el secretario general de UGT Aragón, Daniel Alastuey, ha señalado que durante el transcurso del plan deberán respetarse tanto el cumplimiento de los convenios laborales como las normativas de seguridad.

Por su parte, el secretario general de CC.OO. Aragón, Manuel Pina, ha tratado de desestigmatizar al sector de la construcción como responsable de la crisis económica y ha apuntado que los culpables fueron quienes se dedicaron a la especulación inmobiliaria.

La reclamación de los dos sindicatos ha sido bien recibida por Híjar, quien ha manifestado públicamente su "compromiso" para impulsar medidas de "vigilancia y seguimiento" de las condiciones laborales de los trabajadores.

"Trabajaremos en la redacción de los pliegos de condiciones con los sindicatos", ha insistido el concejal de Vivienda.

Finalmente, Santisteve, ha puesto en valor las virtudes de este plan que está previsto que se financie con un crédito del Banco Europeo de Inversiones.

"Es la mayor inversión pública de Zaragoza en vivienda desde hace 20 años", ha afirmado el primer edil.