El consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sebastián Celaya, ha asegurado hoy que la situación en los servicios de Urgencias de los hospitales aragoneses está "prácticamente normalizada" después de los "picos de presión" vividos ayer en el Royo Villanova de Zaragoza y en el Hospital de Barbastro.

En declaraciones a los medios, Celaya ha insistido en que esta mañana la situación estaba "prácticamente normalizada" y "solucionada" dentro de las circunstancias de la temporada actual, en la que es cierto que se produce una asistencia a Urgencias "superior a la habitual" y que genera "algunos atascos".

Pero, a pesar de los retrasos, ha destacado que los pacientes pasan el triaje nada más llegar a los hospitales y que quienes necesitan atención más urgente "son atendidos inmediatamente".

Quienes tienen que esperar más, ha reconocido, es porque precisamente tienen "problemas de menor importancia que podrían haber sido solucionados incluso por el médico de familia".

Ha recomendado a quienes no se hayan vacunado aún de la gripe que lo hagan y que se tomen medidas de protección, como el lavado de manos continuo y evitar ambientes cargados y cambios bruscos de temperatura, y acudir al médico de familia con los primeros síntomas de la gripe, porque en la mayoría de los casos éste puede solucionar el problema.

La respuesta, no obstante, ha sido "rápida y eficaz" para el consejero, quien ha dicho que para este puente se cuenta con más personal e incluso si hiciera falta se abrirían camas quirúrgicas del Hospital Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza.