Las entidades ciudadanas del Casco Histórico denuncian "la exclusión de cientos" de vecinos del barrio de San Pablo (en torno a 1.400) del sistema sanitario. Por ello, piden al Salud que informe a los afectados, a través del personal sanitario y de las oenegés, de la existencia de un sistema de cobertura alternativo iniciado en abril del 2013 como "un parche que trata de solucionar esta exclusión".

Por eso, el Consejo de Salud de Zona de San Pablo ha solicitado al Gobierno de Aragón que difunda "entre las personas que habitan esta área y entre el personal sanitario --funcionarios y personal de las oenegés-- que trabaja en el sector".

TRABAJADORES SOCIALES El presidente de este consejo, Eddy Castro, hace hincapié en que se cuente con las organizaciones no gubernamentales ya que, "de las 350 personas que se han apuntado a este sistema en todo Aragón, a la mitad se lo ha gestionado Médicos del Mundo, y no los trabajadores sociales, como debería ser".

Desde que el Gobierno de España puso fin a la sanidad universal, dejando fuera a los extranjeros sin papeles desde septiembre del 2012, 12.600 personas se han quedado sin sanidad pública en Aragón. De ellas, el consejo de salud de San Pablo estima que solo en su barrio residen unas 1.400.

Pero, según Eddy Castro, de ellas, solo quince han solicitado hasta ahora su inclusión en el denominado Programa Aragonés de Protección Social de la Salud Pública porque solo se ha difundido entre funcionarios administrativos y trabajadores sociales del sistema sanitario", y la información no está llegando. Es más, "algunos ni saben que han quedado fuera del sistema", añadió.