La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, anunció hoy que el nuevo servicio de trenes de Cercanías de Zaragoza comenzará a operar el próximo 11 de junio con 47 trenes diarios que realizarán el recorrido entre Miraflores y Casetas con cinco paradas.
Álvarez, quien hoy puso en servicio el cierre del Cuarto Cinturón y el nuevo acceso norte a Zaragoza, avanzó que las frecuencias de los trenes de Cercanías variarán en función de los tramos horarios y previó una demanda de 400.000 viajeros al año.
La línea de Cercanías de Zaragoza, con una inversión de 100 millones de euros y 16,6 kilómetros de longitud, comenzará con paradas en Casetas, Utebo, Delicias, El Portillo -cuya estación visitó hoy la ministra- y Miraflores, de manera que sólo quedará pendiente la estación de Goya, tal y como se había comprometido Fomento de cara a la Exposición Internacional.
La ministra también puso hoy en servicio dos infraestructuras de carreteras, el Cuarto Cinturón, que da continuidad a la A-68 (Castellón) con la A-2 (Barcelona), y el acceso norte de Zaragoza, que une la A-23 (Huesca) con la A-2, cuyo presupuesto total asciende a 216,6 millones de euros.
Con la apertura al tráfico de estas dos obras se da continuidad a la autovía Mudéjar (A-23) procedente de Sagunto y Teruel hacia Huesca y Somport a su paso por Zaragoza.
La longitud total de estas dos actuaciones es de 20,1 kilómetros, de los cuales 16,5 corresponden a autovía entre la N-232 y la localidad de Villanueva de Gállego, y 3,6 kilómetros a la variante de la N-II entre el barrio de Santa Isabel y las cercanías del polígono de Malpica.
Estas obras se enmarcan dentro del convenio de colaboración firmado en diciembre de 2005 entre la administración central, el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza para la financiación de la Exposición Internacional.
La ministra de Fomento también tiene previsto abrir hoy al tráfico el puente del Tercer Milenio sobre el río Ebro, uno de los construidos con motivo de la Expo.
El puente, del ingeniero oscense Juan José Arenas, tiene 270 metros de longitud, 36 metros de altura del arco sobre el tablero y un ancho de 43 metros.
Durante su visita, Magdalena Álvarez afirmó que el Gobierno ha "hecho los deberes" y tiene sus "compromisos cumplidos", y destacó el gran momento histórico de transformación de Zaragoza y Aragón por el salto cualitativo y cuantitativo de sus infraestructuras.
Según dijo, "la Expo será un hito temporal para un antes y un después de una Zaragoza que difícilmente reconoceremos dentro de unos años".
Recordó que el Gobierno se involucró desde el principio con la Expo, de la que vaticinó que saldrá "perfectamente" y será el orgullo de todos los españoles.
Magdalena Álvarez, quien apuntó que sólo la inversión del Ministerio de Fomento en obras relacionadas con la Expo asciende a 660 millones de euros, también hizo mención especial de la ampliación y remodelación del aeropuerto de Zaragoza, en el que se han invertido 57 millones.
Durante su recorrido por las nuevas infraestructuras, la ministra estuvo acompañada, entre otras autoridades, por el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, el secretario de Estado de Planificación y Relaciones Institucionales, Víctor Morlán, y el presidente de Expoagua, Roque Gistau.
