La irrupción de la plataforma Médicos Indignados de Aragón (MIA), alejada de colegios o sindicatos, ha sido acogida con normalidad y sin sorpresa por el sindicato de médicos CESM, cuyo secretario general, Lorenzo Arracó, admitió que "todas las organizaciones estamos ahora en el punto de mira y el crecimiento de plataformas en los últimos meses no tiene parangón en la historia porque los médicos están muy enfadados, pero el problema es que lo que puede hacer un sindicato es limitado".
Arracó tendió la mano al encuentro con la plataforma y valoró a su portavoz, el expresidente del Colegio de Médicos, Celso Mostacero. "Aúna la suficiente experiencia y conocimientos para ser una figura idónea" y coincidió con él al afirmar que "los médicos están indignados sea cual sea su opción política, pero los propios militantes del PP reconocen que están aún más enfadados que el resto al gobernar su propio partido".
