El vicesecretario general de Relaciones Institucionales y Política de CHA, Gregorio Briz, ha exigido al Gobierno de Mariano Rajoy que abandone el proyecto del pantano de Biscarrués y asuma responsabilidades políticas por el «varapalo» que ha supuesto la sentencia que anula el proyecto.

Después de que la Audiencia Nacional rechazara el planteamiento del embalse de Biscarrués, en el río Gállego (Huesca), porque la obra afectaría «significativamente a la ecología del río» y no cuenta con los estudios medioambientales y de interés público pertinentes, el Gobierno «debe buscar una alternativa», insistió Briz.

«Queremos que el Ejecutivo de Rajoy asuma la inviabilidad económica y ecológica de este proyecto y se ponga a buscar diferentes opciones que sean una alternativa que esté bajo los principios de la nueva cultura del agua», subrayó el vicesecretario general, para quien «es posible hacerlo si hay voluntad política».

CHA llevará su oposición a este embalse al Senado, a través del senador de Compromis Carles Mulet, quien formulará varias preguntas para su respuesta escrita por parte del gobierno, una de ellas para conocer si prevé recurrir la sentencia de la Audiencia Nacional al Supremo. También para que explique que la sentencia cuestione elementos tan básicos como el cumplimiento de la Directiva Europea del Agua.

PRESUPUESTO

Además, el grupo aragonés busca que el Gobierno anuncie y aclare qué responsabilidades políticas tiene previsto asumir y si va a modificar el presupuesto para que las partidas dedicadas a este embalse puedan destinarse a otra inversión en Aragón, dado que será imposible su ejecución durante este año.

Asimismo, CHA quiere saber si el Gobierno de España ha recibido ya la contestación dada ante la Carta de Emplazamiento de la Comisión Europea sobre la posible infracción en relación con el proyecto del embalse oscense de Biscarrués.

Por otro lado, la Coordinadora Biscarrués-Mayos de Riglos ha pedido a Riegos del Alto Aragón que cese en su empeño de recurrir la sentencia de la Audiencia Nacional que desestima el proyecto de Biscarrués. La coordinadora indicó que el recurso de casación, en caso de ser presentado y admitido, «demorará nuevamente la respuesta a las supuestas necesidades de regadío, de lo que se deduce la falta de interés de la cúpula regante en dar respuesta rápida a sus usuarios».

Además, reclamó que la decisión respecto al futuro del colectivo Riegos del Alto Aragón deberá tomarla «el conjunto del sistema acorde al resultado incompetente de su mala gestión por apostar durante 30 años», señaló.